Sabemos que el alma como principio de la vida
es una caduca concepción religiosa e idealista
pero que en cambio tiene vigencia en su acepción
segunda
o sea hueco del cañón de las armas de fuego
hay que reconocer empero que el lenguaje popular
no está rigurosamente al día
y que cuando el mismo estudiante que leyó en
konstantinov
que la idea del alma es fantástica e ingenua
besa los labios ingenuos y fantásticos de la compañerita
que no conoce la acepción segunda
y a pesar de ello le dice te quiero con toda el alma
es obvio que no intenta sugerir que la quiere
con todo el hueco del cañón.