#SigloXX #SigloXXI #Uruguayos (1997) La ese paréntesis vida
Ésta debe ser la trigésima despedida. Es un trámite que Fernando Varengo conoce de sobra. Como testigo, claro; no como viajero. Asistir a la normal y apasionada discusión de Migue...
Hoy me despierto tosco y solitario no tengo a nadie para dar mi queja… nadie a quien echar mis culpas de… sé que hoy me van a cerrar todas l… que no llegará cierta carta que es…
Estaba a duras penas comprendiendo y me encontré en la calle como per… los gritos y bocinas se colaban insolentes en mi áspera congoja palpé las cicatrices que dejó tu m…
Los sueños son pequeñas muertes tramoyas anticipos simulacros de m… el despertar en cambio nos parece una resurrección y por las dudas olvidamos cuanto antes lo soñado
Todo el mundo lo admite antes no había y ahora nos asombra que aparezcan en la calle en el quiosco en las e… concurran a las puertas a los timb…
Desde temprano había menudeado las llamadas de felicitación. Para el ex torturador (todavía no se sentía cómodo con esa partícula: ex) ya no había peligro. La tan cuestionada ley de amn...
Nunca se consideró un exiliado político. Había abandonado su tierra por un extraño impulso que se fraguó en tres etapas. La primera, cuando lo abordaron sucesivamente cuatro mendigos en...
Esta piel de mis poros y mis alergias esta piel de mis pecas y mis pecados de mis lunares
En el centro de mi vida en el núcleo capital de mi vida hay una fuente luminosa un surtido… que aiza convicciones de cobres y es lindo contemplarias y seguirl…
Me jode confesarlo pero la vida es también un bandone… hay quien sostiene que lo toca dio… pero yo estoy seguro que es troilo ya que dios apenas toca el arpa
Tal vez haya un rigor para encontr… el corazón de rosa rigurosa ya que hablando en rigor no es poc… que tu rigor de rosa no te harte. Rosa que estás aquí o en cualquier…
Fue un sábado de tarde, en plena siesta, cuando sonó la primera llamada. Aún medio aturdido, había alargado el brazo hasta el teléfono, y una voz masculina, ni demasiado grave ni demasi...
Yo soy la secretaria ideal. Mi jefe es elegante, mi jefe es tan discreto, es alto, es distinguido,
Me voy con la lagartija vertiginosa a recorrer las celdas donde líber raúl
Ven dulce vida / nunca es tarde salta sobre las vallas de aflicció… sobre las confidencias del escombr… sobre los odios vestidos de blanco y las coronas de crisantemos