#1988 #EscritoresUruguayos #VientosDelExilio
Quien primero le habló del Ángel fue el tío Sebastián. Mucho antes de que el Ángel apareciera. Quien primero negó al Ángel fue el tío Eduardo. Pero Ana María estaba en la edad de creer ...
Eso dicen que al cabo de diez años todo ha cambiado allá dicen
La primavera frágil / la primavera… pacientemente escucha y atiende mi… con su verde más verde me mira y m… y decide orgullosa que esta vez no… y así / para mi asombro / me quedo…
Aquí está el Palacio Salvo allá está el Victoria Plaza son tan torpes tan horrendos que a uno lo dejan sin habla su fealdad es tan espesa
Aquí empieza el descanso. En mi conciencia y en el almanaque junto a mi nombre y cargo en la pl… aquí empieza el descanso. Dos semanas.
No sé por qué este sábado veintisi… toda la democracia salió a la call… democracia la buena la dulce troglodita la melosa del crimen
Anoche cuando supe que Ayrton Sen… se había inmolado en el circuito i… me invadió una lástima polvorienta una tristeza residual nunca sentí admiración por la fórm…
Cuando aquella muchacha aquella taumaturga aún no había em… recibía diversos homenajes y ofren… en la ribera el agua lamía sus tob… las gaviotas planeaban y hasta las…
De haber tenido un hijo no lo habría llamado ni mario ni orlando ni hamlet ni hardy ni brenno como reza mi fardo onomástico
Desde el palmar inmóvil reconoce a… cuánto orgullo y tesón cuánta dist… en un octubre opaco y remotísimo habían arrancado del puro desalien… acamparon primero en el monzón
El niño que no vino tiene los labios fuertes tiene las manos tiernas el alma como nube no es nadie
Me he quedado junto al árbol veterano y cordial en su sabiduría un pibe alegre y andrajoso corre y recorre el sendero sin nad… en la gramilla blanda y celestina
Con todas las letras y con todos l… dijo mi amigo que la moral era ana… mi amigo dijo que había que ser re… después llegaron los capitanes del… hicieron el consabido acopio de sí…
Yo también tengo ruinas y si acudo al pasado ya no sé a quién o a quiénes busco entre los escombros son ruinas sin prestigio
Qué suerte siempre iguales hermano vos y yo desde aquella alegría