#EscritoresArgentinos (1986) El Lagarto estaba harto
No tendrá Buenos Aires un río de… ni en sus cofres tesoros de vivas… pero el cielo celeste es bandera e… y extensa pampa verde se brinda a… Falto de Budas de oro o faroles d…
Se lo ha llevado el viento, esa ma… el pequeño mensaje que quedara en… se fue sobrevolando, como ebrio o… la rumorosa calle, en la tarde des… Allá irá, todo alma de amor estrem…
Madre, ¿puedo pintar la luna de es… ¿O con vestido rosa, orlado de vio… ¡Pues, noche a noche, sale insulsa… sin nada de color que la avive, co… ¿Por qué será la luna, siempre lun…
Dijiste: «Mar de vidrio», Señor,… un mar que te refleje en toda tu g… por sobre el cual camines —tu lámp… para ver, al trasluz, del mundo la… Dijiste mar de vidrio, un cristal…
Sin saber que es domingo, ruidoso… va llevando su carga la minúscula… el trozo de una hoja en perfilada… columpiase oscilante sin impedir q… Apenas se apresura, que caminar le…
¿Y esta melancolía? ¿Por qué tant… si no hay una razón —o por lo meno… si no existen rencores ni nos muer… ¿De qué ese sentimiento que al áni… ¿A qué causa atribuir tan ciego pe…
Entre un romper de olas descubro e… de la que fue poeta y ante todo mu… La luz va declinando en apagarse l… y ya en el horizonte muere el atar… Como dulce canción me llegan con e…
a Rafael de Diego La mecedora de la abuela acunó mis años de infancia, horas del arrorró y «La Pájara Pi… después a su compás el corazón jov…
«La única tristeza» —insinúa Clot… «es la de no ser santo», añadiendo… ¿Pues no basta, me digo, un corazó… ni el espíritu hecho a piadoso tra… ¿Tampoco es suficiente tolerar la…
No os acongojéis por falta de comi… y menos todavía por lo que el cuer… ya que más que el comer vale la pr… y más aún el cuerpo que lo que lo… Mirad las azucenas, no hilan pero…
Que me traspasen dardos: no habré… que me hiera cruel total indiferen… que los rostros, impávidos, al no… pasen sin advertir siquiera mi pre… Que el desamor se infiltre mientra…
Ven, madre, a descansar de todos t… hasta el jardín umbroso que cultiv… a la luz de luciérnagas y áureos e… y la mágica ayuda de esos seres pe… los gnomos, que se visten con traj…
Detrás de mis paredes, feliz a mi… extraigo del azul la esencia de mi… y escribo entre las nubes —¡añoran… con las letras del alma, un vocabl… Ignorando el tropel que redobla en…
Estoy sola, Señor, y hay mucha ge… estoy triste —no obstante la rient… y mi imagen es débil, perdida, sin… bien que la luz del sol le dé sobr… Temerosa, Señor, del más humilde…
Quedó abrazada al muro, amante, la… y grávido de frutos de oro, el lim… la cola de tijera mostró una golon… y el gorrión revolando, de píos me… Debajo de los árboles era la hierb…