En la sabana tras los prismáticos
la encuentras,
la observas,
serena y viva muchacha
que sonríe
al presentir tu mirada.
Se oculta tras los arbustos
y tú la buscas
con premura,
experto cazador de sombras.
su clara melena la delata
masajeando suavemente
su cuerpo con aceites
tras al baño.
Una mano la tiendes,
tus poros se abren,
se mezclan los deseos,
los animales de la sabana
os cobijan,
entre las sombras de la noche.
@María José Luque Fernández