Yo en la soledad he dicho:
—¿Cuándo cesará el dolor
Que me oprime noche y día?
—¡Nunca!—el eco respondió.
—¿Cómo viviré más tiempo,
En tan cruel opresión,
Cual un muerto en su sudario?
—¡Solo!—el eco respondió.
—¡Gracias, oh suerte severa!
¿Cómo de mi corazón
Acallaré los gemidos?
—¡Muere!—el eco respondió.