Ojalá por una vez deje de sentir que es difícil quererme. Sé que me compongo de silencios largos,
En ocasiones mis acciones se sienten cómo desaciertos, mis palabras cómo fuego,
En efecto lo que no se dice se transforma en agua, que brota de los ojos formando ríos,
La culpa se va tejiendo en hilitos pequeños y finos, y crece el tejido, cómo si fuese telaraña. La araña no entiende
La complicidad se manifiesta en pequeños gestos, sonrisas, miradas, coger de la mano
Veo miles de ojos que me miran con desagrado, con morbo, con deseo,
Pongo en arriendo mi mente, o la vendo, o la regalo, para que no me
Quiero sentir hasta lo que me destruye, para saber a que me enfrento. Aunque curiosa y desafortunadamente soy todo el tiempo mi mayor enemigo, aquel ante el que no cedo, ni el cede a mi...
Nos hicieron creer toda la vida, que el que más corre, el que tiene más afán, la persona que vive su vida con mil pendientes,
Los recuerdos llegan como una ráfaga que aunque no dura mucho parece eterna, y uno incrédulo
Me siento en las sombras, constantemente, por eso busco siempre el sol, pero cuando voy tras de el
Ayer cuando iba, en moto por la Carrera 30, para donde mis hermanas a celebrar Halloween, pude ver como un chico, en medio de la lluvia, se bajó de la bici para ayudar a un pajarito que...
Oye, ven, te cuento que yo te ví, entre los miedos ocultos qué no se dejan ver,
Me alejé del caos y aún en completo silencio seguía habiendo ruido, entonces comprendí que el desorden provenía
El corazón como la cosa más frágil que puede existir, se sale del pecho confundido