#Andaluces #Españoles #Sevillanos #SigloXIX #RimasYLeyendas
Volverán las oscuras golondrinas en tu balcón sus nidos a colgar, y otra vez con el ala a sus crista… jugando llamarán. Pero aquellas que el vuelo refrena…
Espíritu sin nombre, indefinible esencia, yo vivo con la vida sin formas de la idea. Yo nado en el vacío,
Como la brisa que la sangre orea sobre el oscuro campo de batalla, cargada de perfumes y armonías en el silencio de la noche vaga; símbolo del dolor y la ternura,
Hoy la tierra y los cielos me sonr… hoy llega al fondo de mi alma el s… hoy la he visto..., la he visto y… ¡Hoy creo en Dios!
Porque son, niña, tus ojos verdes como el mar, te quejas; verdes los tienen las náyades, verdes los tuvo Minerva, y verdes son las pupilas
Mi vida es un erial, flor que toco se deshoja; que en mi camino fatal alguien va sembrando el mal para que yo lo recoja.
Los invencibles átomos del aire en derredor palpitan y se inflaman… el cielo se deshace en rayos de or… la tierra se estremece alborozada. Oigo flotando en olas de armonía
Cuando entre la sombra oscura perdida una voz murmura turbando su triste calma, si en el fondo de mi alma la oigo dulce resonar,
Saeta que voladora cruza, arrojada al azar, y que no se sabe dónde temblando se clavará; hoja que del árbol seca
Hace algunos meses que, visitando la célebre abadía de Fitero y ocupándome en revolver algunos volúmenes en su abandonada biblioteca, descubrí en uno de sus rincones dos o tres cuaderno...
No sé lo que he soñado en la noche pasada; triste, muy triste, debió ser el s… pues despierto la angustia me dura… Noté, al incorporarme,
Cendal flotante de leve bruma, rizada cinta de blanca espuma, rumor sonoro de arpa de oro, beso del aura, onda de luz,
Las ondas tienen vaga armonía: las violetas, suave olor; brumas de plata, la noche fría; luz y oro, el día; yo, algo mejor:
—¿Qué es poesía?, dices, mientras… en mi pupila tu pupila azul, ¡Qué es poesía! ¿Y tú me lo pregu… Poesía... eres tú.
¡No me admiró tu olvido! Aunque d… me admiró tu cariño mucho más, porque lo que hay en mí que vale a… eso... ¡ni lo pudiste sospechar!