Tu vientre sabe más que tu cabeza y tanto como tus muslos. Ésa es la fuerte gracia negra de tu cuerpo desnudo.

¡Ay, señora, mi vecina, se me murió la gallina! Con su cresta colorada y el traje amarillo entero, ya no la veré ataviada,

Pues aquí tiene usted, Julieta, cómo por fin enseño mi oreja de poeta. Pero un poeta sin spleen y sin ninguna

La palma que está en el patio, nació sola; creció sin que yo la viera, creció sola; bajo la luna y el sol,

Sobre el duro Magdalena, largo proyecto de mar, islas de pluma y arena graznan a la luz solar. Y el boga, boga.

¿Po qué te pone tan brabo, cuando te dicen negro bembón, si tiene la boca santa, negro bembóm? Bembón así como ere

De tierras de Guatemala volando mi avión partía; lloraba con el motor, con la hélice decía: —¡Guatemala,

Mi prima Vera venía por marzo, en la Primavera. Mi jardín la recibía, al tiempo que le decía: —Bienvenida, prima Vera.

¿Cómo estás, Puerto Rico, tú de socio asociado en sociedad? Al pie de cocoteros y guitarras, bajo la luna y junto al mar, ¡que suave honor andar del brazo,

El Aconcagua. Bestia solemne y frígida. Cabeza blanca y ojos de piedra fija. Anda en lentos rebaños con otros animales semejantes

Tengo del Rin, del Ródano, del E… tengo los ojos llenos; tengo del Tíber y del Támesis, tengo del Volga, del Danubio, tengo los ojos llenos.

Chévere del navajazo, se vuelve él mismo navaja: Pica tajadas de luna, mas la luna se le acaba; pica tajadas de canto,

Una paloma cantando pasa: —¡Upa, mi negro, que el sol abrasa! Ya nadie duerme,

París, febrero 12. Ángela y Flora: Puesto que os santifica y os decor… el sol en esa playa en primavera y os perfuma y os dora,

No sé por qué piensas tú, soldado, que te odio yo, si somos la misma cosa yo, tú.