#EscritoresMexicanos (1974) Los eróticos otros poemas y
Escribo bajo el ala del ángel más… la sombra de la lluvia y el sonreí… me conducen, oh estatuas, hacia un… hacia donde se encierra la gran se… Escribo las palabras y el penetran…
Primero Que nada: Me complace Enormísimamente Ser
Lentamente, la paloma violeta anidó en el hombro derecho de la m… Lentamente, una sonrisa de oro se hizo luz en los labios de la mu…
Siempre Amé Con la Furia Silenciosa
Te saludan: los árboles y las banderas triunfa… los pájaros y los ríos del pueblo, las ágiles canciones del pionero, las películas a colores y las foto…
Celestemente dueña de la forma y d… —la forma de la orquídea, el vuelo… maravillosamente gentil y malicios… doncella de las nubes. Transparente de nieve,
Donde habita, donde come, donde parece un arenoso acantilado, allí es un cordero de ámbar con oj… y algo acerca de la dicha sexual t… Luego viene lo intolerable y malig…
Ardía el caballero con sus ojeras… llameaba su piel e iluminaba la ci… Moría de hambre el capitán Fiallo acostado en su lecho de una bruta… y un leño por almohada
La lluvia tejía su encaje plateado. Las nubes negrísimas sombreaban la noche morena. En el plano brillante
Ahora Me Cumplen O Me
Si de un vuelo la esencia iluminas… esta celda que a tientas desconozc… si de un frágil destello, de una b… juvenil o poema, en breves pétalos… descendiese tu vida; si a mi vida
Este lánguido caer en brazos de un… esta brutal tarea de pisotear mari… este pensarse árbol, botella o cho… huella de pie dormido, navaja verd… este instante durísimo en que una…
Era un caballo rojo galopando sobr… Era un caballo rojo, colorado, col… «como la sangre que corre cuando m… Era un caballo rojo con las patas… Agonizó en el río a los pocos minu…
Miro pasar las nubes de la noche. Miro pasar tu cuerpo, tu sombra de… Oigo los sueños de la noche (nubes también, o aves) y conozco el misterio de lo eterno…
El gran río penetró la roca viva y se adelgazó hasta el miedo y el… se hizo rayo se hizo ruina se hizo… y hoy padece a lo largo de pieles… a la orilla del cocodrilo que me s…