#Modernismo #Nicaragüenses #SigloXIX #SigloXX #1887 #Abrojos
¡Es con voz de la Biblia, o verso… que habría que llegar hasta ti, Ca… ¡Primitivo y moderno, sencillo y c… con un algo de Washington y cuatro… Eres los Estados Unidos,
EL mar como un vasto cristal azog… Refleja la lámina de un cielo de z… Lejanas bandadas de pájaros marcha… El fondo bruñido de pálido gris. El sol como un vidrio redondo y op…
¡Su padre los echa! Yo, ha poco,… soberbio, iracundo, lanzarlos de a… No importa, hijos míos; diré como… «¡Dejad a los niños que vengan a m…
He aquí la exacta copia de un caso digno de fe. Lo cuento tal como fue, pues no es de cosecha propia.
Padre y maestro mágico, liróforo c… Que al instrumento olímpico y a la… Diste tu acento encantador; Panida! Pan tú mismo, que coros c… Hacia el propíleo sacro que amaba…
¿Eva era rubia? No. Con negros oj… vio la manzana del jardín: con lab… rojos probó su miel; con labios ro… que saben hoy más ciencia que los… Venus tuvo el azur en sus pupilas,
Tan alegra, tan graciosa, tan apacible, tan bella... ¡Y yo que la quise tanto! ¡Dios mío, si se muriera! Envuelta en oscuros paños
Sobre el diván dejé la mandolina y fui a besar la boca purpurina, la boca de mi hermosa Florentina. Y es ella dulce y rosa y muerde y… y es una boca rosa, fresa;
De D. Luis de Góngora y Argote… Mientras el brillo de tu gloria au… ser en la eternidad sol sin ponien… fénix de viva luz, fénix ardiente, diamante parangón de la pintura,
Vivió el pobre en la miseria, nadie le oyó en su desgracia; cuando fue a pedir limosna lo arrojaron de una casa. Después que murió mendigo,
¿Que por qué así? No es muy dulce la palabra, lo confieso. Mas, de esa extraña amargura la explicación está en esto: después de llorar mis lágrimas
De lo que en tu vida entera nunca debes hacer caso: la fisga de un envidioso, el insulto de un borracho, el bofetón de un cualquiera
¿Cuentos quieres, niña bella? Tengo muchos que contar: de una sirena de mar, de un ruiseñor y una estrella, de una cándida doncella
¡Ea! apretad esas cinchas y apercibid los overos; y que ya tasquen los potros el bocado de los frenos. Preparad las jabalinas,
El ave azul del sueño sobre mi frente pasa; tengo en mi corazón la primavera y en mi cerebro el alba. Amo la luz, el pico de la tórtola,