Inerte... ¿acaso es así?
Te contemplo... y sí, lo es.
¿Es verdad,
o solo eco triste de esta realidad?
Sigo atrapado en el instante,
pasmado, inerte...
¿Es la soledad callada,
o la mentira que corroe y muere?
Como vértigo, como costumbre,
te sigo, te busco en la vida;
con amor quise vencerte,
y entre lágrimas, amarte.
Pero he perdido,
y en mi asombro inerte,
te observo entre sombras,
con la angustia en la frente.
Porque te amé,
y he perdido... pero te amé,
sepultado en este amor inerte.