Ver no es solo mirar, es descubrir,
detenerse en la esencia de las cosas.
Desde que estás siento que me ves,
que me ven, por primera vez.
Es fascinante pero aterrador.
Es un miedo dulce, un despertar.
Porque de algún modo cuando me ves,
logro verme también.
Cuando me ves algo en mi se revela,
aquello que ni yo sabía que era.
Gracias,
por verme y regalarme tu mirada.
Y con ello,
regalarme el don de descubrirme.
De encontarme.