Alguna vez recuerdo ciertas noches de junio de aquel a… casi borrosas, de mi adolescencia (era en mil novecientos me parece cuarenta y nueve)

¿Fue posible que yo no te supiera cerca de mí, perdido en las mirada… Los ojos me dolían de esperar. Pasaste. Si apareciendo entonces

quam magnus numerus Libyssae arena… ..................................… aut quam sidera multa, cum tacet n… furtiuos hominum uident amores. Catulo, VII

La nostalgia del sol en los terrad… en el muro color paloma de cemento —sin embargo tan vívido—y el frío repentino que casi sobrecoge. La dulzura, el calor de los labios…

Aunque la noche, conmigo, no la duermas ya, sólo el azar nos dirá si es definitivo. Que aunque el gusto nunca más

Mi recuerdo eran imágenes, en el instante, de ti: esa expresión y un matiz de los ojos, algo suave en la inflexión de la voz,

Una clara conciencia de lo que ha… es lo que le consuela. Se levanta cada mañana a fallecer, discurre p… en donde sórdamente duele el tiemp… que se detuvo, la herida mal cerra…

Pasada ya la cumbre de la vida, justo del otro lado, yo contemplo un paisaje no exento de belleza en los días de sol, pero en invier… Aquí sería dulce levantar la casa

Nuevas disposiciones de la noche, sórdidos ejercicios al dictado, l… que yo aprendí, pirata, oh joven pirata de los ojos azules… En calles resonantes la oscuridad…

Despiértate. La cama está más frí… y las sábanas sucias en el suelo. Por los montantes de la galería llega el amanecer, con su color de abrigo de entretie…

Porque son ya seis años desde ento… porque no hay en la tierra, todaví… nada que sea tan dulce como una ha… para dos, si es tuya y mía; porque hasta el tiempo, ese parien…

La misma calidad que el sol de tu… saliendo entre las nubes: alegre y delicado matiz en unas ho… fulgor de un cristal, modulación del apagado brillo de la lluvia.

A qué vienes ahora, juventud, encanto descarado de la vida? ¿Qué te trae a la playa? Estábamos tranquilos los mayores

Nos reciben las calles conocidas y la tarde empezada, los cansados castaños cuyas hojas, obedientes, ruedan bajo los pies del que regre… preceden, acompañan nuestros pasos…

Como los sueños, más allá de la idea del tiempo, hechos sueños de sueño os llevo, días de Pagsanján. En el calor, tras la espesura,