Ponzoña que se bebe por los ojos, dura prisión, sabrosa al pensamien… lazo de oro crüel, dulce tormento, confusión de locuras y de antojos; bellas flores mezcladas con abrojo…

Si tantas partes hay por vuestra p… para que os ame y que por vos sosp… ¿cómo queréis, mi bien, que me ret… de tal empresa y que de amar me ap… Si el cielo en sola vos muestra y…

Con gran curiosidad, con gran cuid… por la rara beldad que en ellos ví… curaba sus cabellos noche y día el famoso David el hijo amado. Cuando, crecidos ya, siendo aqueja…

Un blanco, pequeñuelo y bel corder… Vandalio para Dórida criaba, cuando viendo que el lobo lo lleva… dijo alzando la voz, airado y fier… «¡Al lobo, al lobo, canes, que os…

¡Ay, qué plazo tan largo y tan ext… ay, qué término luengo y enojoso, ay, qué tiempo prolijo y trabajoso… ay, qué tardío remedio a tan gran… ¡Ay, salud perezosa y con engaño,

Si no os digo verdad, si en algo o… sobre mi vida torne el desengaño; si falta hay en mi fe, si os trato… dolor no quepa en vos del mal que… si no sois causa vos del mal que s…

Tiéneme ya el dolor tan lastimado, está ya tan dañado el sentimiento, que ningún nuevo mal de nuevo sien… que no hiere en lugar de antes lla… Estoy ya del vivir tan enfadado

Sesenio, pues que vas do vengo ago… antes do siempre estoy, do ir quis… cuando a ver llegarás la gran ribe… del Betis, que por ti tanto se hon… si aquella Brisis que tu alma ador…

Tanto espacio de tierra y tan gran… de mar, tantas naciones tan extrañ… tantos tormentos y ásperas montaña… ni el Alpe de terror y fieras llen… ni tanta soledad, ni el verme ajen…

Por nuestro polo el sol no parescí… al venturoso Antártico alumbraba, cuando un pastor que, sin él, cieg… con lágrimas llorando, así decía: «¡Oh luz sola que luz da al alma m…

De la pena de Sísifo se cuenta que sube un grave peso a una monta… áspera, inhabitable, obscura, extr… do cuanto puede ver, más le atorme… Subido a la alta cima, antes que s…

Mientra el fiero dolor de su torme… con mayor soledad Vandalio llora, con voz de su morir denunciadora dijo triste, lloroso y descontento… «¡Oh gloria de estas selvas y orna…

Quien tanto de su propio mal se ag… señora, como yo, razón le falta, ni por nuevo dolor se sobresalta, ni del que ha de venir recela nada… Quien tiene el alma ya tan transfo…

Como el calor de la celeste esfera calienta y vivifica y da consuelo cuanto hay elemental acá en el sue… árbol, planta, animal, flor, hierb… así, señora, Amor de esta manera

Aquel rumor que de improviso suena… como de la experiencia está entend… robando la color, turba el sentido… al alma de recelo o gozo llena. Pero nace tal bien de aquella pena