Luna de sangre envuelve mi alma en ti sé mi amante nocturna. Soy tu astro oscuro besa con tu fulgor
Entre pasillos navega mi mente en un caos que emerge del volcán en plena erupción. Abro puertas infinitas, en el laberinto de Creta
Vomito el dolor a voces, a lágrimas, a silencios a suspiros, a solas.
Te he repetido hasta quedarme sin voz que soy tuya, tuya por siempre. Créeme cuando te digo que nunca he amado
Maquillo mis ganas mordiendo tu boca que me provoca, tus caderas balanceas y me vuelvo loca.
Soy animal salvaje, que nadie amaestra. Ojalá te des cuenta de lo imbécil que has sido, dejándome marchar.
Caminando por las calles tuve un déjá vu, sentí que había estado allí. Mis pasos resuenan en el empedrado,
Mis uñas se clavaron en tus muslos de nácar haciendo surcos en ellos, mis manos subieron por las piernas… hasta tocar tu pubis sedoso.
Dicen del Müki que es un Haiku expulsando la rigidez de 17 sílabas e inició “la forma libre Haiku”. (Rechazando el uso de los kigos, aunque puede tener kireji en el tercer verso como el...
El tren me trae, la soledad dorada, hilando mí alma. Aquel otoño bordé en aquel pañuelo,
Entre mis piernas cae la lluvia calándome siento mi sangre palpitar, gotas de agua resbalan por mi boca.
Hubo un crepúsculo morado que salió de mi ser, dicen que todo vuelve a ti, pero en esa tarde el ocaso jugó conmigo y me llevó
Tienes miedo de salir al escenario, sufres cada vez que cantas. Vuelas y vuelas con las malditas pastillas,
Mentías, cada vez que hablabas, jamás has sido capaz de amar, solo, abandonado por todos, te encontrarás. Eres un soberbio, altanero,
Tu aliento melodía para mi espíritu poema encadenado son tus dedos en mi piel. Tus ojos me cantan romances