Tres haikus
Un girasol, inmune ante el astro. Así el sueño. Comienza. Voces que invitan, como garras de águila
He sabido de almas hermosas, gracias a ti. Deja te cuento que por casualidad, un día que a mi corazón lo visitab… mi reflejo vi en un cristal,
Me he vuelto amiga del destino, y hasta la suerte, convive con mis presagios. ¿Te veré alguna vez? Una estrella de suscesos lo proyec…
Sal de mi, la incomprención no me permitió el… Sal de mi, la añoranza donde habitaste lo per… Sabor a sal, dejaste.
Buscando imaginación, te encontré dinamismo. Tú ya existías, en aquello que guardo como lo más… Te das en cenit,
Encauzada en un recuerdo, nombro tu ausencia, en el pectoral de esta tarde, como oxidada, como de sombras,
Ente devorador de lo finito, abrasador es tu resultado. Aire, agua, tierra, agotas.
Un reloj de amatista y polvo contiene los despojos del pasado. Es guía de todo aquello que la paciencia ha moldeado, sin… Vamos despacio
A la orilla de esta verdad, que me desborda el porvenir, vuelvo esta noche alada, a liberarme de tu esencia. Aunque te conjuro en sueños,
Tiempo líquido, pasas, y con ello cambias las alas del infortunio. Llegas,
Curiosidad desmedida, transparentes tus ideales tu existencia es testigo, de la singularidad en la vida. Quiero que siempre
Instante, las hojas permutan, en refinada variación. Presente, en tibio sosiegan, en suave aflicción. Llegas, lluvia!
Recostados en la almohada quisiera mirarte de frente tanto por escuchar ¿Has vivido? ¿Has sido feliz?
Juntos, porvenir, fuimos; aferrada a tus alas, viento, que al compás etéreo del fuego, se desvanecían en mis manos. Recuerdos de un futuro intenso,