Al cobijo de un portal Paso la no… Con el brazo en horizontal y La p… Pasaba la gente y miraba… Miraba… Parose un niño y preguntó ¿Por qu… ¡Es una noche muy fría! ¡No parec…

Desperté sudoroso y empapado, y jadeando en extremo, vi la hora; sentía en mi cuerpo, un calor copa… al pecar impuro, en lo que en mí,… ¡Solo por ella, el alma, sufre y l…

En ambiente chilaho coincidimos Varios los daiquirís que nos tomam… Sin tardar de la mano nos cogimos Fijamente a los ojos nos miramos Y sin más al hotel nos dirigimos

Sí, paseo junto a ti con orgullo, No es así, en otras parejas celosa… Fuisteis creadas tan dulces y herm… Que no hago caso, de ningún murmul… No se por qué al mirarte me aturul…

Castígame ¡OH señor! Por mi peca… Mi vida ya no tiene algún sentido Hasta hoy fui un pura sangre desbo… Ser más que yo a nadie le he permi… Solo a una mujer le fue consentido

La sudoración en mi piel El torre… Y el sabor, Amargo cual la hiel.… Tremenda migraña y Mi cuerpo ardí… Y sola, en un bosque sin caminos… Frente a mí Dieciséis peldaños co…

Y dejó en libertad su pensamiento Y su corazón sintió acelerarse. Al tiempo, comenzó a ruborizarse Por el hecho recordado al momento. Cuando la vio se quedó sin aliento

Son árboles desnudos que con sus hojas, crean en la tie… bellos tapices mudos ¡Siempre ganan, al verano, la guer… Ya en la playa, el “botellón” no s…

Construí un puente repleto de ilus… Sin emplear aceros ni cementos Comencé entre suspiros y lamentos Empleando deseos y emociones Obra magna por sus con notaciones

Todo mi cuerpo se agito Cual noche tormentosa Cuando tus ojos Se posaron el los míos Sabiéndote mujer y Diosa

Añoro tu mirada desnudándome Y la fuerza que al amar Pones amándome Deseo el tacto de tus manos Que al posarlas en mí

El Cielo fue quebrado, el mismo día, que fui abandonado y, el corazón varado, estando de ti, más que enamorado, agrietó entera el alma.

Tal cual como cada mañana hacía El gallo en hora certera no calla ¡Es el amanecer de un nuevo día! La marea moja la arena en playa. Los rayos del Sol en el horizonte

De mi corazón no puedo arrancarte Lastimando mi alma tal sufrimiento Si tú no me das el consentimiento Le pido al Cielo poder olvidarte Aunque se que no dejaré de amarte

¡Ay de aquél! que solo ve La hermosura del ciprés ¡Ay de aquél! quien Alcanzando su cónica copa En ella no se detiene y