Asómate amor mío que el cielo ha encendido un fanda… en su comba lejana Y no hace frío El viento música entre árboles un…

A esa abuela ensoñada venida de Constantinopla A esa mujer malvada que me esquilmaba el pan A ese monstruo mitológico

Ah desdichados padres Cuánto desengaño trajo a su noble… el hijo menor el más inteligente En vez de abogado respetable

He robado parte de tu cuerpo y de… Le he tendido una celada a los rec… que aquí te recuerdo ¿Recuerdas am… El cielo de la noche casi azul se… entre tus pestañas Noche vibrátil

En este cuerpo En el cual la vida ya anochece Vivo yo Vientre blando y cabeza calva Pocos dientes

Antes de devorarle su entraña pens… Antes de ofenderlo de gesto y pala… Antes de derribarlo Valorad al loco Su indiscutible propensión a la po…

Que te vas a acordar Isabel de la rayuela bajo el mamoncillo d… de las muñecas de trapo que eran n… de la baranda donde llegaban los b… Habana cargados de…

La nieve de los años bajó de tu cabello a tus pupilas y te quedaste ciego y luego te quedaste casi mudo Castigo de la vida

Si quieres saber de Raúl Que habita estas prisiones Lee estos duros versos Nacidos de la desolación Poemas amargos

A vuestras espaldas Vino fuerte Amores desdichados de mi vida Los… Me construí poderoso y soñador y ustedes se quedaron con las hilachas inasibles de mi p…

Más allá de la noche que titila en… Más allá incluso de mi primer recu… Está Lola– mi madre– frente a un… empolvándose el rostro y arreglánd… Tiene ya treinta años de ser hermo…

He recorrido hospitales mitigando… Una locura que durante muchos años ayudó a mi imaginación en mi poesí… pero que después se volvió amenaza… y puso en peligro mi vida

Los habitantes de mi aldea dicen que soy un hombre despreciable y peligroso Y no andan muy equivocados Despreciable y Peligroso

Llegó Abril con sus aguas escasas colocando diamantes en cada hoja El mes de los árboles aún sediento… El mes de la enredadera que trepa…

Los poetas, amor mío, son Unos hombres horribles, unos Monstruos de soledad, evítalos Siempre, comenzando por mí. Los poetas, amor mío, son