A José D. Frías
#Mexicanos #Modernismo #SigloXX (1919) Zozobra
Mi vida, enferma de fastidio, gust… de irse a guarecer año por año a la casa vetusta de los nobles abuelos como a refugio en que en la paz di…
Del fondo de mi alma oscura van hasta ti mis dolores como una sarta de flores en empobrecida blancura. Del ensueño a la luz pura,
Tierra mojada de las tardes líquid… en que la lluvia cuchichea y en que se reblandecen las señori… el redoble del agua en la azotea..… Tierra mojada de las tardes olfati…
Si vieras, amiga, qué espacio transcurre mi lenta ex… la marcha inmutable del tiempo fat… mi añeja dolencia; mis torvos fastidios apenas mitiga
Con planta imponderable cruzas el mundo y cruzas mi concie… y es tu sufrido rostro como un éxt… que se dilata en una transparencia… ¡Pobrecilla sonámbula!
Primer amor, tú vences la distanci… Fuensanta, tu recuerdo me es propi… Me deleita de lejos la fragancia que de noche se exhala de tus ties… y en pago de tan grande beneficio
Blanca flor de los claustros, irri… capricho de don Juan, me abraso en… de platicar contigo, bella hermana… en la paz del oscuro locutorio. Mi cabeza en tus senos, el mortuor…
Lluvia eterna ¡cómo azotas el cristal de mi ventana! si parece que tus gotas
De tu pueblo a tu hacienda te llev… la cabellera en libertad y el pech… guardado por cien místicas aldabas… Metías en el coche los canarios, la máquina de Singer, la maceta,
¡Oh qué gratas las horas de los ti… en que quiso la infancia regalarno… Dormida por centurias en un bosque… despertaste a la blanda caricia de… Y después, sin que fueran los barb…
El viejo pozo de mi vieja casa sobre cuyo brocal mi infancia tant… se clavaba de codos, buscando el v… de la tortuga, o bien el iris de l… es un compendio de ilusión
Al decir que las penas son fugaces en tanto que la dicha persevera, tu cara es sugestiva y hechicera y juegan a los novios los rapaces. Al escuchar la apología que haces
Nunca, señor, pensé que el verso m… cuando te hablara en él por vez pr… la música filial de los veinte año… del huérfano infelice la voz fuera… Nada valió la familiar plegaria;
Soñé que la ciudad estaba dentro del más bien muerto de los mares m… Era una madrugada del Invierno y lloviznaban gotas de silencio. No más señal viviente, que los eco…
Fuensanta: las finezas del Amado, las finezas más finas, han de ser para ti menguada cosa, porque el honor a ti resulta honra… La corona de espinas,