Toca mi piel, de barro, de diamant… oye mi voz en fuentes subterráneas… mira mi boca en esa lluvia oscura, mi sexo en esa brusca sacudida con que desnuda el aire los jardin…

Terramuerta terrisombra nopaltorio temezquible lodosa cenipolva pedrósea fuego petrificado cuenca vaciada

A veces la poesía es el vértigo de… vértigo de la dicha y el vértigo d… el paseo con los ojos cerrados al… y la verbena en los jardines subma… la risa que incendia los preceptos…

EN su tallo de calor se balancea La estación indecisa Abajo Un gran deseo de viaje remueve Las entrañas heladas del lago

Entre la tarde que se obstina y la noche que se acumula hay la mirada de una niña. Deja el cuaderno y la escritura todo su ser dos ojos fijos.

Infrecuentes (pero también inmerec… Instantáneas (pero es verdad que e… Hay instantes que estallan y son a… Otros son un río detenido y unos á… Otros son ese mismo río arrasando…

En duermevela oigo correr entre bu… un incesante río. Es la catarata negra y blanca, las… mundo confuso, despeñándose. Y mi pensamiento que galopa y galo…

Mis pasos en esta calle Resuenan en otra calle donde oigo mis pasos

AL confín yesca del espacio calcinado la ascensión amarilla del árbol

Rápidas manos frías retiran una a una las vendas de la sombra Abro los ojos todavía

Bajo mis ojos te extendías, país de dunas –ocres, claras. El viento en busca de agua se detu… país de fuentes y latidos. Vasta como la noche,

Habla deja caer una palabra Buenos días he dormido todo el inv… Habla Una piragua enfila hacia la luz Una palabra ligera avanza a toda v…

Jardines despeinados, casa grande como una hacienda. Hay muchos cuartos vados, muchos retratos de celebridades desconocidas.

Vuelve a la noche, racimo de horas sombrías; córtalo, come el fruto de tiniebla… saborea la ignorancia. Con orgullo de árbol