Homenaje a Claudio Ptolomeo
#Mexicanos #PremioCervantes #PremioNobel #SigloXX
La plaza es diminuta. Cuatro muros leprosos, una fuente sin agua, dos bancas de cemento y fresnos malheridos.
¿De qué cielo caído, oh insólito, inmóvil solitario en la ola del ti… Eres la duración, el tiempo que madura
Las horas, su intangible pesadumbr… su peso que no pesa, su vacío, abigarrado horror, la sed que expí… frente al espejo y su glacial visl… mi ser, que multiplica en muchedum…
UNA casa, un jardín, no son lugares: giran, van y vienen. Sus apariciones abren en el espacio
AL confín yesca del espacio calcinado la ascensión amarilla del árbol
Por el arcaduz de sangre mi cuerpo en tu cuerpo manantial de noche mi lengua de sol en tu bosque artesa tu cuerpo
Y las sombras se abrieron otra vez y mostraron su cuerpo: tu pelo, otoño espeso, caída de ag… tu boca y la blanca disciplina de tus dientes caníbales,
Tiemblan los intrincados jardines juntan los árboles las frentes cuchichean El día arde aún en mis ojos
Quieta en mitad de la noche no a la deriva de los siglos no tendida clavada
No estoy en la cresta del mundo, El instante no es columna de estilita, no sube desde mis plantas el tiempo,
Pequeño sol quieto sobre la mesa, fijo mediodía. Algo le falta: Noche.
Con la lengua cortada y los ojos abiertos el ruiseñor en la muralla Ojos de pena acumulada y plumaje de sangre
Un pulso, un insistir, oleaje de sílabas húmedas. Sin decir palabra oscurece mi frente un presentimiento de lenguaje.
Mis pasos en esta calle Resuenan en otra calle donde oigo mis pasos
Todo comienza en un jardín, lo recuerdo, me recuerdo. Un jardín con niño, a tientas, me adentro. Pasillos, puertas que dan a un cuarto de hotel, a una interjección, a un páramo urbano. ...