Homenaje a Claudio Ptolomeo
#Mexicanos #PremioCervantes #PremioNobel #SigloXX
Un quieto resplandor me inunda y c… un deslumbrado círculo vacío, porque a la misma luz su luz la ni… Cierro los ojos y a mi sombra fío esta inasible gloria, este minuto,
Hay una noche, un día, un tiempo hueco, sin testigos, sin lágrimas, sin fondo, sin olvid… una noche de uñas y silencio, páramo sin orillas,
Como el aire hace y deshace sobre las páginas de la geología, sobre las mesas planetarias, sus invisibles edificios:
A veces la poesía es el vértigo de… vértigo de la dicha y el vértigo d… el paseo con los ojos cerrados al… y la verbena en los jardines subma… la risa que incendia los preceptos…
Coronado de sí el día extiende sus… ¡Alto grito amarillo, caliente surtidor en el centro de… imparcial y benéfico! Las apariencias son hermosas en es…
¿Por qué tocas mi pecho nuevamente… Llegas, silenciosa, secreta, armad… tal los guerreros a una ciudad dor… quemas mi lengua con tus labios, p… y despiertas los furores, los goce…
Del verdecido júbilo del cielo luces recobras que la luna pierde porque la luz de sí misma recuerde relámpagos y otoños en tu pelo. El viento bebe viento en su revuel…
centered1 Sombras del día blanco contra mis ojos. Yo no veo nada sino lo blanco: la hora en blanco, el alma
En el centro del mundo del cuerpo del espíritu la grieta el resplandor No En el remolino de las desaparicion…
Los sucesivos soles del verano, la sucesión del sol y sus veranos, todos los soles, el solo, el sol de soles, hechos ya hueso terco y leonado,
Blanco el palacio, blanco en el lago negro. Lingam y yoni. Como la diosa al dios tú me rodeas, noche.
RÁFAGAS turquesa loros fugaces en parejas Vehemencias el mundo llamea Un árbol
III A la orilla, de mí ya desprendido, toco la destrucción que en mí se a… palpo ceniza y nada, lo que llueve el cielo en su caer oscurecido.
Torre de muros de ámbar, solitario laurel en una plaza de p… golfo imprevisto, sonrisa en un oscuro pasillo, andar de río que fluye entre palac…
Hora nula, cisterna donde mi pensamiento a sí mismo se bebe. Por un instante inmenso he olvidado mi nombre.