#Chilenos #PremioNobel #SigloXX
Amor, amor, las nubes a la torre d… subieron como triunfantes lavander… y todo ardió en azul, todo fue est… el mar, la nave, el día se desterr… Ven a ver los cerezos del agua con…
Fidel, Fidel, los pueblos te agra… palabras en acción y hechos que ca… por eso desde lejos te he traído una copa del vino de mi patria: es la sangre de un pueblo subterrá…
Pero olvidé que tus manos satisfac… las raíces, regando rosas enmaraña… hasta que florecieron tus huellas… en la plenaria paz de la naturalez… El azadón y el agua como animales…
Detrás de mí en la rama quiero ver… Poco a poco te convertiste en frut… No te costó subir de las raíces cantando con tu sílaba de savia. Y aquí estarás primero en flor fra…
He ido marcando con cruces de fueg… el atlas blanco de tu cuerpo. Mi boca era una araña que cruzaba… En ti, detrás de ti, temerosa, sed… Historias que contarte a la orilla…
Chisporrotea en el aceite hirviendo la alegría del mundo:
Amor, de grano a grano, de planeta… la red del viento con sus países s… la guerra con sus zapatos de sangr… o bien el día y la noche de la esp… Por donde fuimos, islas o puentes…
Llénate de mí. Ansíame, agótame, viérteme, sacrif… Pídeme. Recógeme, contiéneme, ocú… Quiero ser de alguien, quiero ser… Soy el que pasó saltando sobre las…
Abeja blanca zumbas—ebria de miel—… y te tuerces en lentas espirales d… Soy el desesperado, la palabra sin… el que lo perdió todo, y el que to… Última amarra, cruje en ti mi ansi…
Al golpe de la ola contra la piedr… la claridad estalla y establece su… y el círculo del mar se reduce a u… a una sola gota de sal azul que ca… Oh radiante magnolia desatada en l…
Es hoy: todo el ayer se fue cayend… entre dedos de luz y ojos de sueño… mañana llegará con pasos verdes: nadie detiene el río de la aurora. Nadie detiene el río de tus manos,
Todos me piden que dé saltos, que tonifique y que futbole, que corra, que nade y que vuele. Muy bien. Todos me aconsejan reposo,
Cuántas veces, amor, te amé sin ve… sin reconocer tu mirada, sin mirar… en regiones contrarias, en un medi… eras sólo el aroma de los cereales… Tal vez te vi, te supuse al pasar…
«Vendrás conmigo» —dije—sin que na… dónde y cómo latía mi estado dolor… y para mí no había clavel ni barca… nada sino una herida por el amor a… Repetí: ven conmigo, como si me mu…
Ay sí, recuerdo, ay tus ojos cerrados como llenos por dentro de luz negr… todo tu cuerpo como una mano abier… como un racimo blanco de la luna,