1 ESTROFA Siento que el mundo se me viene en… Cuando te vi besando con otro homb… Dentro de mi pecho se me abrió una… Un dolor mortal que lleva tu nombr…

¿Qué es lo que más me gusto de ti? ¡Realmente yo diría todo amor! Me gusto tus labios, Me gusto tu boca Y tus besos,

Quiero dejarte estos bellos poemas… Para decirte que Dios está contig… Cantándote canciones de amor A través de este trovador mi amigo… Por eso, ahora vengo a llevarme

Si me dieran de amor un beso Quisiera que fuera de nube Así de ese beso saldría ileso Por tanta mentira que sube. Un beso que tanto enloquece

Corazón que se ha robado La palabra de mi boca! Al fondo de mi ser amado Le llega al alma le toca. Corazón que me quema

En el corazón Del albañil, Hay un alma, Que se pone A crear,

Son tus ojos de muchacha bonita Son los placeres de mi mirar, Son dulces ojos ojitos serenos Son luceros que no dejan de brilla… Son tus ojos unos ojos impresos

Tu sabes lo que siento yo al mirar… A través de tus oscuros ojos, Desde la profunda soledad de tu gu… Siento el consuelo de algún reposo… Sentiré, tal vez, el frío del pozo…

Tú que quisiste traerme a este mun… En la carne y con gran alma entera… Tú que quisiste desde lo muy profu… Amarme en tus brazos y abiertament… En mis dulces horas que contadas l…

¡Melancolía!, patriarca del saber; En tus manos me dispongo, A cantar mis dulces penas... En tu regazo de tu asombro. Yo soy el poeta abandonado;

No es nada, de lo que tiene tu cue… Ni tu rostro, ni tus ojos y tampoc… No es nada de lo que tu y yo conoc… Ni el nido de amor, donde mi cuerp… No es tu boca; no, ni son tus beso…

Tus ojos son tan perfectos Y único cuando los miro, Son tan brillantes y divinos Con su esencia radiante. Y al inspirarme en ellos...

¡Esos ojos bellos son los culpable… Cuando en sesiones te pienso! Luego todo cobra forma por si solo En una voz dulce en que me anegó. Ya no quiero que mi tinta sea mi b…

Nuevamente estoy sentado aquí sobre mi asiento, sobre otros días melancólicos de mi vida, mi corazón que se encierra en el sufrimiento, ¡quitaesencia que de mi alma se me roba la alegrí...