Señor, he visto tus maravillosas obras
Tu amor que con gracia nos brindas,
Y con tu presencia nos honras
Llenándonos de amor todos los días.
Tu pecho acoge aquellos corazones
Que al darse perdido, se da por muerto,
En ti reina el amor tus partes nobles
Y nos da vida tu palabra de aliento.
Así brillo mi sol en una mañana
Cuando iluminó mi frente tu esplendor,
Te pido por mi sobrina oh hosanna
Que la sanes de todo mal mi redentor.
Señor, he visto tus maravillosas obras
Sé de lo que eres capaz ¡oh mi Dios!
Por, Miguel Ángel Peñafiel Miranda.
Poeta guayaquileño.