Ni otro perfume, ni otro aroma,
Ni el perfume de las rosas,
O el perfume de otro encanto.
Podrá
Con su perfume celestial,
Alturas que perfumaron otro cielo
Con su aroma de mujer bestial.
Hay, manos
Que unos dioses vertieron,
La composición poética
La astrología del universo.
Una diosa gloriosa
Que emerge bajo el mar.