En ese dolor mortal su amor me envuelve
La espina doliente en mi corazón situada
Sólo en lo solitario de esta hora de muerte
Te confieso que ha de extrañarte mi alma.
Pero cae la hora de la venganza, y te amo.
Y en mi la noche entra su invasión poderosa
Del círculo que en negro y blanco te acabo
Al filo de convertir tu cuerpo en una rosa.
¿Por qué pensaste? Que mi amor no valía
Que pena que tu pensaras tan severo
Humillas ingratamente de este trovero
Que ha hecho tanto por amarte cada día.
Dime, ¿Por qué eres amor así conmigo?
Si tu sabes muy bien que yo te quiero
Tú sabes cuanto yo deseo estar contigo
Y estrellarme en tus bellos ojos de lucero.
Sin tu ausencia mi vida es una campaña solitaria
Que en la tierra canta todas sus tristezas
Donde mis labios anclan y mi húmeda ansia
Soltar en delirio mi bandada de flechas.