#SigloXX #SigloXXI #Uruguayos #1974 #ElAmorLasMujeresYLaVida
En las manos te traigo viejas señales son mis manos de ahora no las de antes doy lo que puedo
A esta altura ya nadie me nombra por mi nombre: Octavio. Todos me llaman abuelo. Incluida mi propia hija. Cuando uno tiene, como yo, ochenta y cuatro años, qué más puede pedir. No pido ...
Seguro que los diarios no lo preguntarán los árboles ¿serán acaso solidarios? ¿digamos el olivo de jaén
Las modas pasan, los escombros que… * De todos los ismos sólo queda el a… * Los parricidas son huérfanos preco…
Aquella esperanza que cabía en un… aquella alta vereda junto al barro… aquel ir y venir del sueño, aquel horóscopo de un larguísimo v… y el larguísimo viaje con adioses…
Ya nadie graba en las paredes en los troncos luis y maría raquel y carlos
Wall street especula con la inquin… en tokio sube el miedo sísmico la OCOE y el FED se dan mutuo c… el SIPRI y el SCAF polemizan s… entre el NAFTA y la nafta retoza…
Hace tanto que pasé mi ecuador los años bajan como rompehielos traen edictos nada promisorios el pellejo es conciso y elocuente tiene arrugas y manchas desgarbada…
Nunca me ha sido fácil encontrar la almohada adecuada a mis sueños a su medida exacta en la cabeza noche
El hecho de ser la única mujer entre seis hermanos me había mantenido siempre en un casillero especial de la familia. Mis hermanos me tenían (todavía me tienen) afecto, pero se ponían b...
Cuando Jesús arrojó del templo a los estupefactos mercaderes los defenestrados juraron vengarse durante casi dos milenios se reuni… en Roma en París en Wall Street
Esperando que el viento doble tus ramas que el nivel de las aguas llegue a tu arena esperando que el cielo
Porque te tengo y no porque te pienso porque la noche está de ojos abier… porque la noche pasa y digo amor porque has venido a recoger tu ima…
Un tallito de verdes y un añoso al… las veinticuatro horas y el instan… una vislumbre dicha por las manos… el amor es un centro con extrañas… clausura y campo abierto
Cuando la noche se pobló de ánimas de ángeles de ratas y de truenos el más cruel de los crueles se abasteció de agravios y los poso en los nidos y en las l…