Más allá de los males y los bienes
tu mejor aventura cotidiana
es lidiar con la vida lisa y llana
que lograste y afinas y mantienes.
La noche se ha quedado sin rehenes
y entra el sol por tu verso y tu ventana.
Tengo, dijiste en dimensión cubana,
dijiste tengo y por supuesto tienes
pueblo que te oye bajo tantos cielos
porque has hallado simplemente el modo
de cantar nada menos que a los más.
Con tus ochenta y con tus dos abuelos
y tu muchacho corazón ya todo
lo tienes, Juan con Todo, Nicolás.