#SigloXX #SigloXXI #Uruguayos #1981 #PoemasDeLaOficina
Siento que mi pueblo escucha cuando canto lo que siento. Ganapán del escarmiento, no me pongas la capucha. No vas a conseguir nada:
A las diez de la mañana el Jefe de Redacción lo había llamado a su despacho y él captó de inmediato que el gesto era severo. Gilardi, voy a encargarle una nota importante, espero que no...
Tuve un largo poema que aunque se prodigaba en sus mal… al poco tiempo se quedó sin rojo tuve otro con jazmines frágiles hogareños e insondables
Ya sos mayor de edad tengo que despedirte pesimismo años que te preparo el desayuno que vigilo tu tos de mal agüero
En mi ciudad hay varios espantos i… pero también existen los visibles el más de todos es un monumento que planearon levantaron y sobre todo inauguraron
Son incontables jueves de babel y galeras de berrinches con sorna de gritos en el cielo de orden y de caos
Durante muchos años y tantísimos versos el paisaje no estuvo en mis poemas vaya a saber
Tenés tal maña, tal arte y un suspiro tan discreto que podría revelarte mi secreto. Usás tan suaves maneras,
La muerte se puso una cara de mons… una cara de monstruo horrible esperó y esperó detrás de una esqu… salió al fin de la sombra como un… y el niño huyó más rápido que su p…
Se las arregló para ser contemporá… medio siglo después de su muerte creó una justicia natural para neg… pobres tuvo pupila suficiente como para m…
Quién hubiera dicho que estos poemas de otros iban a ser míos después de todo hay hombres que no…
Fue como en un delirio así que no recuerdo si el hotel del abismo era un abyss sheraton o un abyss hilton
Me cuesta como nunca nombrar los árboles y las ventanas y también el futuro y el dolor el campanario está invisible y mud… pero si se expresara
Esta ciudad en la que Lenin aprendió a esperar y en la que Borges vino a morir co… los elefantes a su cementerio esta ciudad se contempla en su lag…
Como en tantas y tantas de sus pesadillas, empezó a huir, despavorido. Las botas de sus perseguidores sonaban y resonaban sobre las hojas secas. Las omnipotentes zancadas se acercaban a...