#Mujeres #SigloXX #Uruguayos
Es un coco. Tiene cáscara oscura y el exterior… Mas, cuando la corteza se ha roto, la carne, casta y firme, parece ra… Cruzó el mar para mí. Un jadeante…
Asida de una rama de neblina dialogo con mi ayer, oro y torment… La furia del clavel entre la menta enciende todavía la colina. Mientras la dulce tarde se asordin…
Este viento que riza y que desriza agua, nube y espuma transitoria, se adormece en mi sien, flor sin v… escala de clavel deshecha aprisa. El lejano perfume se desliza
Hemorragia de luna sobre el parque… Todo duerme, hasta el loco surtido… El mastín, taciturno, nos contempl… Y una brisa de encanto posa el ala… Al andar, nuestros pasos no rechin…
Esta inquietud... Esta inquietud.… Mano me dio la llama y la negrura De esta escondida esfervescencia l… Que en salobre sabor sube a mi boc… Esta inquietud, esta inquietud con…
La palma, talle juvenil del aire, el granado, mi brasa superada, mi George Dickson, sangre bien ri… violetas, miniaturas al desgaire, han de rodear mi casa, la del sueñ…
Bajo la luna llena, que es una obl… vagamos taciturnos en un éxtasis v… como sombras delgadas que se desli… las arenas de bronce de la orilla… Silencio en nuestros labios una ro…
Ángel Falcó me trajo heroica talla de México, jardín de colorines y ella le da a mi casa serafines y está al paso de idilios y batall… En su mano con lustre de azucena,
¡Beso que ha mordido mi carne y mi… con su mordedura que hasta el alma… ¡Beso que me sorbe lentamente vida como una incurable y ardorosa heri… ¡Fuego que me quema sin mostrar la…
Agua limpia, clara, clara, clara, tan limpia y tan clara que parece… tan clara y tan limpia que yo la d… convertida en la tela de un vestid… ¡Qué feliz la novia rubia que lo u…
Estaba tan absorta frente al mundo que no sentí como volaba el tiempo siempre adelante con sus duras gar… cargadas de sucesos y momentos, halcón imperturbable, me llevaba
En tus ojos sombríos me he mirado Como en ci agua de dos lagos negro… Y un vértigo de abismo tenebroso Me ha hecho temblar de angustia. ¡Ah si caigo en el fondo de la sim…
El ojo verdeoro de mi perro vale más que el fatal de la victor… Aquél es mansedumbre sin memoria, éste, aullido de muerte, filo y hi… La ternura de casta en que me enci…
En el hato de vacas cariblancas y mamones terneros bien nutridos, el viento aprovisiona sus mugidos, restañando su látigo en las ancas. Junto a la llama leo libro amado.
Bendita la herida que llaga mi pla… bendita la angustia que borró mi r… Mi boca es más pura desde que no c… y mis pies llagados andan más de p… Bendita la saya de burda arpillera