En la menor Asia mis ojos tornados
vieron aquella Galatia, do fueron
las gentes que al rey Bitinio venieron,
dando socorros bien galardonados;
los campos de Frigia tanto llorados,
Caria, Isauria vimos en pronto,
Lidia, Panfilia e tierra de Ponto,
do Naso e Clemente fueron relegados.