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#EscritoresEspañoles #Letrillas #Romances (44) XLIV
Sacros, altos, dorados capiteles, Que a las nubes borráis sus arrebo… Febo os teme por más lucientes sol… Y el cielo por gigantes más cruele… Depón tus rayos, Júpiter; no cele…
Poco después que su cristal dilata… Orla el Dauro los márgenes de un… Cuyas plantas Genil besa devoto, Genil, que de las nieves se desata… Sus corrientes por él cada cual tr…
Frescos airecillos, Que a la Primavera Le tejéis guirnaldas Y esparcís violetas, Ya que os han tenido
Esta que admiras fábrica, esta pri… Pompa de la esculptura, oh caminan… En pórfidos rebeldes al diamante, En metales mordidos de la lima, Tierra sella, quen tierra nunca op…
Hermosas damas, si la pasión ciega No os arma de desdén, no os arma d… ¿Quién con piedad al andaluz no mi… Y quien al andaluz su favor niega? En el terrero, ¿quién humilde rueg…
Fragoso monte, en cuyo basto seno Duras cortezas de robustas plantas Contienen aquel nombre en partes t… De quien pagó a la tierra lo terre… Así cubra de hoy más cielo sereno
Con diferencia tal, con gracia tan… Aquel ruiseñor llora, que sospecho Que tiene otros cien mil dentro de… Que alternan su dolor por su garga… Y aun creo que el espíritu levanta
Con razón, gloria excelsa de Vela… Te admira Europa, y tanto, que ce… Su robardor mentido pisa el coso, Piel este día, forma no alterada. Buscó tu fresno, y extinguió tu es…
Por tu vida, Lopillo, que me borr… Las diez y nueve torres del escudo… Porque, aunque todas son de viento… Que tengas viento para tantas torr… ¡Válgame los de Arcadia! ¿No te c…
Varia imaginación que, en mil inte… A pesar gastas de tu triste dueño La dulce munición del blando sueño… Alimentando vanos pensamientos, Pues traes los espíritus atentos
—Téngoos, señora tela, gran mancil… —Dios la tenga de vos, señor solda… —¿Cómo estáis acá afuera? —Hoy me… Por vagabunda, fuera de la Villa. —¿Dónde están los galanes de Cast…
Mientras Corinto, en lágrimas des… La sangre de su pecho vierte en va… Vende Lice a un decrépito indïano Por cient escudos la mitad del lec… ¿Quién, pues, se maravilla deste h…
Ya que con más regalo el campo mir… (Pues del hórrido manto se desnuda… Purpúreo el Sol y, aunque con len… Suave Filomena ya suspira, Templa, noble garzón, la noble lir…
Érase una vieja de gloriosa fama, amiga de niñas, de niñas que labran. Para su contento
En el caudaloso río Donde el muro de mi patria Se mira la gran corona Y el antiguo pie se lava, Desde su barca Alción