La noche viene desnuda: senos de luna, guantes morados. Con los brazos en alto ya la estoy esperando.

La fatiga, la inmensa fatiga de los días repetidos. (Toda alegría supone algo de heroísmo.) Admirable enemiga,

Mientras las estrellas brillan tem… te diré una palabra sencilla y ant… palabra siempre dicha, pero nunca… palabra que tan sólo de tú a tú co… Te amo.

Salpicada de espuma, de salitre, desnuda, desde el mar, viene gritando: La vida, sí, la vida misma: ¡Un delirio por los prados!

Cuando ya nada se espera personalm… mas se palpita y se sigue más acá… fieramente existiendo, ciegamente… como un pulso que golpea las tinie… cuando se miran de frente

Pasarán gaviotas veloces, altas ga… sobre casas de cristal, terrazas d… donde muchachas blancas tocan los pianos de cristal. Pasará una brisa de algas y mar

Se detiene en el borde del abismo… viniendo desde el fondo, rampante,… una serpiente alada, una música va… Escapa por la suave pereza de su c… que en el fondo era fango,

Iban los dos vestidos con descaro —minifalda, melenas— cogidos de la mano, tan jóvenes que casi daban miedo, tan absortos en un cero

Con cambiarte de traje, te cambio… (No adivinas mi angustia. No sé c… Si te revuelvo el pelo tú ríes loc… mientras a mí me duele sentirte ta… Tanto puedo variarte que no sé ya…

Levanta tu edificio. Planta un ár… Combate si eres joven. Y haz el a… Mas no olvides al fin construir co… lo que más necesitas: Una tumba, u…

Vivir es fácil y, a veces, casi al… Esta tarde –mar, pinares, azul–, suspendido entre los brazos ligerí… y entre los tuyos, dulce, dulce mí… un ritmo palpitante me cantaba:

Cuando la Sexta Flota mancilla nu… pienso en Cuba. Cuando los reactores yankis nos pe… pienso en Cuba Cuando los invasores nos denuncian…

Y al fin reina el silencio. Pues siempre, aún sin quererlo, guardamos un secreto.

Mi vicio, mi locura, mi alegría, ¡todavía muchacha! Mi nunca suficientemente amada, cámbiame los ojos si así quieres, pónmelos de ira.

Quizás, cuando me muera, dirán: Era un poeta. Y el mundo, siempre bello, brillar… Quizás tú no recuerdes quién fui, mas en ti suenen